sábado, 1 de enero de 2011

Viejas cartas, viejos amantes.

Recordar el pasado es fácil en esta época. Con mis recuerdos, los olvidos, el pasado y la pasión  me traen a la mente  estas cartas de amor y de melancolía provocadas por la distancia, conociendo al hombre atra vez de sus palabras y tinta.



                                                                Querida josephina
No he pasado un día sin amarte; no he pasado una noche sin estrecharte en mis brazos; no he tomado una taza de té sin maldecir la gloria y la ambición, que me tienen alejado del alma de mi vida.

En medio de las tareas, a la cabeza de las tropas, al recorrer los campos, mi adorable josefina está sola en mi corazón, ocupa mi espíritu, absorbe mi pensamiento.

Si me alejo de ti con la rapidez de la corriente del Ródano es para volverte a ver más pronto. Si, en plena noche, me levanto para trabajar, es porque ello puede adelantar en algunos días la llegada de mi dulce amiga, y no obstante, en tu carta del 23, del 26 Ventoso, me tratas de vous. ¡Tú misma me tratas de usted! ¡Ah, malvada! ¿Cómo has podido escribir esa carta? ¡Qué fría es!... ¡Ah, qué sucederá dentro de 15 días!...

Adiós, mujer, tormento, dicha, esperanza y alma de mi vida, que amo, que temo, que me inspira sentimientos tiernos que me llaman a la Naturaleza y movimientos impetuosos tan volcánicos como el trueno.

Yo no te pido amor eterno ni fidelidad, sino solamente…verdad, franqueza sin limites. El día en que digas te amo menos será el último de mi amor o el último de mi vida.

Si mi corazón fuese bastante vil para amar sin ser correspondido lo destrozaría con mis dientes. ¡Josefina! ¡Josefina! Acuérdate de lo que te he dicho algunas veces: la Naturaleza me ha dado un alma fuerte y decidida. Ella te ha hecho de encaje y gasa. ¿Has dejado de amarme?...


Querida mia
Ninguna más poseerá mi corazón nunca, nunca.
Oh Dios!!
¿Porqué tiene uno que ser separado de alguien a quien ama tanto? y además mi vida en un infierno.
Es ahora una vida desgraciadatu amor me hace a la vez el más feliz y el más desgraciado de los hombres.
A mi edad yo necesito una vida
tranquila y estable,
¿puede existir eso en nuestra relación?
Angel mio, debo cerrar la carta de una vez y así podrás recibirla ya.
Cálmate, sólo a través de una consideración calmada de nuestra existencia podemos alcanzar nuestro propósito
de vivir juntos.
Cálmate, ámame, hoy, siempre y  ayer, que mis  lágrimas anhelantes por ti,  tú mi vida, mi todo.
Adiós.
Continúa amándome, nunca juzgues mal el corazón fiel de tu amado,
siempre tuyo,
siempre mia,
siempre nuestros...."

Beethoven


Mi adorada y bella amante :

Recibí tu carta del 29 de Septiembre,
justamente en el momento más
ocupado , ocupación que he dejado de lado
para satisfacerme y atender
tus dulces palabras, que convierten
a mi corazón en un reloj
desacompasado por la nostalgia de no
tenerte entre mis brazos.

Tu sola me has robado el alma y yo
me ocupo solo de pensar en ti.
Nada distrae más mi atención y mis ocupaciones
que el interrogante de tu mirada
sobre mi amor hacia ti.

Que diré yo si no te tengo junto a mi?
Hagamos juntos un propósito!
Que sea a la hora del té, cuando tu te


conviertas a mis pensamientos y los mios se vayan con los tuyos.
Te gusta? De todas maneras, esta conexión solo tiene su triunfo en
la esperanza que tengo de regresar y confundirme con tu aliento.


Tu amante idolatrado, que se muere por ti...!!! Simón Bolívar 


1 comentario:

  1. genial...yo también esa carta de NApoleón.

    Increíbles frases.


    buen blog

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